Por Arturo Pérez-Reverte
Editorial Alfaguara. Novela histórica y de aventuras de 355 páginas, publicada en 2006. Precio aproximado: 40 pesos.
La espléndida saga del Capitán Alatriste corrobora que no existen géneros menores, sino escritores con más o menos talento. Hay quien desdeña el relato de aventuras por pueril. Se equivoca. Las correrías de un matarife honorable resultan atrapantes, aunque, por cierto, el libro refulge más en su carácter de novela histórica. Y de las excelentes. Incluye una meditación profunda sobre la España eterna, la infame condición humana y la ética del camarada; también personajes exóticos o con tormentos interiores. Todo ello, cubierto con una lámina de oro fino. La prosa que esculpió Arturo Pérez-Reverte, tan clásica como moderna, es un placer para el oído y el espíritu. ¡Pardiez! Aquél que ame el vocablo raro y escogido, la palabra que no debió extraviarse en la negrura de los tiempos, saldrá saciado. Hasta se reproduce una deliciosa carta apócrifa de Don Francisco de Quevedo, íntimo del Capitán.
Pérez-Reverte, gran estilista, nos guía pues a una turbulenta frontera líquida, donde cada raza tiene asuntos que ajustar. España, más atenta a su reputación que a la prosperidad, domina medio continente y se acuchilla con la otra mitad. En 1627, el Mediterráneo no está para ternezas o melcochas. Diego Alatriste Tenorio, difícil de verbos y fácil de aceros, ahora va en galera corsaria. Se ha enrolado en el tercio de Nápoles para escabechar al sarraceno y al inglés, atajar la saña morisca y cruzar espadas con quien cuadre. Lo acompaña, como siempre, Iñigo Balboa Aguirre -el narrador, a la sazón- no ya como paje, sino casi como iguales. Hombres duros como piedras malviven en una era en que la compasión está fuera de lugar y el esclavismo y el saqueo son una forma de ganar sustento. Hidalgos de pacotilla hallan compensación en vender cara la piel.
Abandónese pues, vuestra merced, al puro goce de la aventura.
Guillermo Belcore
Publicado en el suplemento cultural del diario La Prensa.
CALIFICACION: Muy Bueno
Editorial Alfaguara. Novela histórica y de aventuras de 355 páginas, publicada en 2006. Precio aproximado: 40 pesos.
La espléndida saga del Capitán Alatriste corrobora que no existen géneros menores, sino escritores con más o menos talento. Hay quien desdeña el relato de aventuras por pueril. Se equivoca. Las correrías de un matarife honorable resultan atrapantes, aunque, por cierto, el libro refulge más en su carácter de novela histórica. Y de las excelentes. Incluye una meditación profunda sobre la España eterna, la infame condición humana y la ética del camarada; también personajes exóticos o con tormentos interiores. Todo ello, cubierto con una lámina de oro fino. La prosa que esculpió Arturo Pérez-Reverte, tan clásica como moderna, es un placer para el oído y el espíritu. ¡Pardiez! Aquél que ame el vocablo raro y escogido, la palabra que no debió extraviarse en la negrura de los tiempos, saldrá saciado. Hasta se reproduce una deliciosa carta apócrifa de Don Francisco de Quevedo, íntimo del Capitán.
Pérez-Reverte, gran estilista, nos guía pues a una turbulenta frontera líquida, donde cada raza tiene asuntos que ajustar. España, más atenta a su reputación que a la prosperidad, domina medio continente y se acuchilla con la otra mitad. En 1627, el Mediterráneo no está para ternezas o melcochas. Diego Alatriste Tenorio, difícil de verbos y fácil de aceros, ahora va en galera corsaria. Se ha enrolado en el tercio de Nápoles para escabechar al sarraceno y al inglés, atajar la saña morisca y cruzar espadas con quien cuadre. Lo acompaña, como siempre, Iñigo Balboa Aguirre -el narrador, a la sazón- no ya como paje, sino casi como iguales. Hombres duros como piedras malviven en una era en que la compasión está fuera de lugar y el esclavismo y el saqueo son una forma de ganar sustento. Hidalgos de pacotilla hallan compensación en vender cara la piel.
Abandónese pues, vuestra merced, al puro goce de la aventura.
Guillermo Belcore
Publicado en el suplemento cultural del diario La Prensa.
CALIFICACION: Muy Bueno
PD: Pérez-Reverte reinventó las aventuras con capa y espada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario