
Stephen King inocula a los lectores maduros -como el administrador de este blog- el virus de la nostalgia. Su magnífica reconstrucción de la vida cotidiana a fines de los cincuenta y principios de los sesenta me ha provocado dolorosas saudades, en mi caso de los años ochenta (pido dejar por un momento lo político de lado). Extraño las costumbres, los lugares, los sabores, las marcas, los programas de televisión, los automóviles, las personas que ya no están en Morón y que si bien nunca formaron parte del círculo íntimo de afectos de alguna manera me enriquecían, como Raúl, el levantador de quiniela apostado en la puerta de la bicicletería de Reinaldo, por citar un recuerdo hermoso.
Los hábitos de una vida común y corriente -sin desgracias ni tragedias- forman parte de una armonía universal, que si son alterados por un intruso -esa es la tesis panglosiana de King- causan calamidades. Todo cambio en el continuo espacio-tiempo es para peor, proporcional a su magnitud histórica. Salvar a JFK de morir en Dallas significa que el racista George Wallace arrojará una bomba nuclear en Hanoi en 1970. Es decir, vivimos en el mejor de los mundos posibles. Los viajes en el tiempo dejan residuos que fastidian a la máquina. Cada viaje al pasado -a través de las burbujas temporales que subsisten como otra extravagancia de la naturaleza- crea su propia cuerda que se termina enmarañando con las demás. El profesor Jake Epping terminó convirtiéndose así en el Candido de Voltaire.
Pero no es la teoría científica al voleo ni la débil ucronía de Stephen King lo que en realidad deseo compartir en esta oportunidad, sino la evocación de la música escuchada con fruición medio siglo atrás. Picado de curiosidad seguí las migas de pan que el escritor fue arrojando por el camino de la trama. Y me encontré con ocho maravillas de la era del rock en pañales o incluso antes.
1) ‘In the Mood‘. 1946. Glenn Miller. Es anterior, pero aún tenía vigencia. Pinche aquí.
2) ‘At the Hop‘. 1957. Danny & The Juniors. Pinche aquí. (¡Impresionante, mi favorito!)
3) 'Since I Don´t Have You'. 1959. Skyliners. Llamé a su chica. Es para escuchar en pareja. Ahora pinche aquí.
4) ‘Whispering Bells‘. Del Vikings. Pinche aquí o mejor aquí. Vaya movimiento el de los veteranos.
5) ‘Whole Lotta Shakin' Going On’. 1957. Jerry Lee Lewis. Pinche aquí o, si prefiere la versión madura, hágalo aquí.
6) ‘Wings of a Dove’. Ferlin Husky. Pinche aquí. Nunca verá un coro tan cool, se lo garantizo.
7) ‘This Time´. 1961. Troy Shondell. Pinche aquí.
8) ‘Ooh My Head‘. Ritchie Valens. Puede verlo en acción a Ritchie (pinche aquí) o la version remasterizada que suena mejor (pinche aquí).