sábado, 3 de noviembre de 2012

El mal menor

C. E. Feiling

Fondo de Cultura Económica. Novela de terror, 182 páginas. Edición 2012


Para gozo del lector severo y exigente, el Fondo de Cultura Económica se ha lanzado a recuperar libros preciosos y frescos de la Argentina. La atinada dirección de Ricardo Piglia permitió pues lanzar otra vez al ruedo una de las mejores novelas de terror -si no la mejor- que ha dado el castellano. Decía Stevenson que "todos los hombres mueren jóvenes''. Añadimos desde esta trinchera que hay casos especialmente dolorosos. El mal menor prueba que la desaparición de C.E. Feiling (Rosario 1961-1997) a los treinta y seis años de edad nos ha privado de un talento exquisito, acaso el más borgeano de su generación.

He aquí una obra que el maestro Borges denominaba "de imaginación razonada'', rarísimas en nuestro idioma. Feiling ha concebido que la humanidad se divide en "soñadores'' y "arcontes'', los doce justos de la leyenda judía que sostienen al mundo. Su misión es evitar que los "prófugos'' irrumpan desde el más allá en La Vigilia (donde estamos todos nosotros). "El Cerco'' es perforado en Buenos Aires, entre los barrios de San Telmo y San Cristóbal para ser exactos. Un puñado de valientes y patéticos arcontes intenta restaurar el equilibrio, pero cosas espeluznantes ocurren, atrocidades que parecen provenir de las peores pesadillas o del cine de George Romero.

Anota Piglia en el prólogo que el libro es extraordinario por la calidad de su prosa y por la intensidad del suspenso. Tiene toda la razón. Debe agregarse además la agradable sensación de que en el timón hay siempre una persona de enorme inteligencia y con una gran curiosidad intelectual. La fascinante trama está salpicada con observaciones lúcidas sobre cualquier tema, desde la obsesión de los varones por la fellatio (su hipótesis causaría ampollas a mis amigos) hasta la Revolución Cubana. Es también magnífica la construcción de personajes. Me recuerda a Fogwill, cuando obraba como el impiadoso entomólogo de los argentinos. El mal menor, para concluir, corrobora cabalmente una hipótesis que defiende este blog desde hace muchos años: no existen géneros menores sino buena o mala literatura.

Guillermo Belcore
Publicado con ligeras variaciones en el Suplemento de Cultura de La Prensa.

Calificación: Excelente


PD: ¿Cómo es posible que haya pasado por alto esta joya, escrita en los viscosos años del menemismo? Soy un chambón, lo admito. Pero tengo la sospecha de que las reseñas que se escriben en los diarios también tienen su cuota de responsabilidad. Al elogiarlo todo de una manera desaforada, al no hacer distinciones ni aceptar las jerarquías, rebajan o tornan invisible el texto sublime. Hay una idea que me anda rondando sobre la cual quizás escriba algo en el blog: ¿tiene algún valor la sinceridad en la crítica literaria?

10 comentarios:

io dijo...

Creo que (siempre me parecio uno de los temas mas interesantes de "Palido Fuego", aunque sea secundario) es la unica virtud posible.
Saludos.

Matías dijo...

Guillermo, te dejo una imagen: hace dos años, en la Feria del Libro, se conseguía el libro "Los cuatro elementos" de Feiling (que recopila la novela que reseñás más otras dos, tan hermosas como esta) a 2$ en un stand. Yo había gastado 40$ el año anterior para adquirirlo.
Ahora, la reedición del libro nos permite acceder nuevamente a este libro y tal vez corra mejor suerte. En todo caso, se trata de qué corriente comercial, crítica y canonizante la agarre. Digamos, ahora porque lo prologa Piglia y lo incluye en una colección de FCE seguramente se le preste un poquito más de atención.
En fin, el lector (al menos, de literatura argentina) termina guiándose por recomendaciones amigas y por la sorpresa más que por las reseñas en los diarios y suplementos... Abrazo!

Anónimo dijo...

Amigo. Hay que seguir buscando. Siempre.
Alejandro. Desde chile.

Anónimo dijo...

A la pregunta de si tiene algún valor la sinceridad en la crítica literaria, respondo modestamente: Sigo su blog atentamente, y con él armo mi lista de libros pendientes de leer o de ser adquiridos. Su propia sinceridad me ha llevado a interesarme por sus comentarios y, luego de comprobar un gusto semejante, a hacer siempre caso de sus recomendaciones. A los críticos insinceros los detecto, y directamente no presto atención a sus notas. Con admiración y gratitud, Diana.

Guiasterion dijo...

Estimada Diana:

A mi me ocurre lo mismo con los críticos fallutos (contundente adjetivo que usaba mi abuela). Son fáciles de desenmascarar.

Me siento muy feliz por sus palabras. Gracias.

G.B.

Anónimo dijo...

Acerca de los críticos fallutos de cine, y cómo detectarlos fácilmente. Estudiando la calificación de cierta película (verá la que tomé como modelo), ya tengo claro los análisis de quiénes seguiré en lo sucesivo.
Cordialmente, Diana.

Anónimo dijo...

Acerca de los críticos fallutos de cine, y cómo detectarlos fácilmente. Estudiando la calificación de cierta película (verá la que tomé como modelo), ya tengo claro los análisis de quiénes seguiré en lo sucesivo.
http://www.todaslascriticas.com.ar/pelicula/nestor-kirchner-la-pelicula
Cordialmente, Diana.

io dijo...

Tome esta recomendacion al pie de la letra y consegui la novela.
Mi conclusion, luego de haberla terminado: no digo que sea mala, pero tampoco se aproxima (no llega ni cerca, en realidad) a la categoria de "excelente".
Me parece loable el valiente intento de incursionar en un genero tan denostado (por no decir, olimpicamente ignorado) en nuestro pais, siempre avido de pavadas con el necesario transfondo politico (un carnicero de Jujuy que necesita comprar un cenicero...DURANTE LA DICTADURA!), y la prosa, en general, es agradable, hasta tal vez elegante.
Pero los dialogos dejan mucho que desear, lo mismo que la relacion entre los personajes y el hilado de los temas tratados.
Admito que el final es notable, pero la ultima linea ("Ines no soporto...") tiene la bajeza del chiste imbecil.

epigen dijo...

completamente de acuerdo con io. Una novela sobrevalorada. Al llegar a la última parte ya no me interesaba para nada el destino de Inés, el cerco etc. El recurso del narrador al final no sorprende desde EL quijote. EL chiste sobre el carnicero jujeño es genial. CAsi que me niego a seguir leyendo novelas que transcurran durante la última dictadura militar; aunque me pareció mjuy divertida la parodia al género que hizo Kohan en Dos veces junio (era una parodia no?)
saludos

Anónimo dijo...

me pueden ayudar porfavor manana tengo q entregar un trabajo me puedemn decir a q se denomina 1)-"sonadores" y a quienes como "arcontes" dela novela del mal menor 2)-a q se llama "visitantes" , "profugos " y " familiares". dar ejemplos ¿q funcion cumple el "cerco" y cual fue el motivo q permitio una "brecha " en el mismo ? porfa ayudenme tengo mas pregunta porfavor