sábado, 20 de abril de 2013

Hot sur

Laura Restrepo

Planeta. Novela, 555 páginas. Edición 2013


En algún punto entre la literatura de supermercado y el arte se encuentra esta novela de aventuras y de denuncia. No carece de ambición, por supuesto, incluso ambición política y étnica, pero las ñoñerías, el uso recurrente de lo cursi, la obsesión por el mensaje, y el fracaso (o desinterés) por separar a la autora de sus personajes condenan la obra a la mediocridad. No es para paladares exigentes. El gran novelista, se sabe, es también un demiurgo. Sus creaturas tienen vida propia. Don Quijote no es Don Miguel de Cervantes; ni Madame Bovary es Flaubert. Esa distancia nunca se percibe aquí. Los personajes piensan y hablan, como Doña Laura Restrepo (Bogotá 1950), es decir como una intelectual latinoamericana que hace el numerito del catedrático asqueado por el sistema capitalista, la vida moderna y Estados Unidos en general.

La trama usa la historia de una inmigrante colombiana, injustamente encarcelada por el asesinato de su marido policía y corrupto, para abominar de los horrores del sistema carcelario. Todo preso es político. Una buena conciencia indignada también por el racismo y la xenofobia. El sueño americano se convierte muy a menudo en pesadilla, es el sonsonete. En fin. El manuscrito autobiográfico de María Paz, el diario de su profesor de literatura y un reportaje al papá de éste van desarrollando los hechos. Un melting pot de recursos periodísticos, según la definición de la autora. Cuando la sufrida inmigrante sale de la cárcel se enfrenta a su codicioso cuñado. Crímenes espeluznantes, rituales, se suceden. Se hacen concesiones al gusto popular por el ‘gore’ y las conspiraciones. Dicen que así se venden más libros.

La prosa es transparente y facilona, enriquecida de tanto con alguna metáfora deliciosa, como comparar el juguetón spanglish con el encuentro en la cama de dos amantes inexpertos. El problema con la novela comprometida y maniquea es que no consigue superar los tópicos progresistas. Aburre tanta corrección política.
Guillermo Belcore

Calificación: Regular

PD: En El País de Madrid elogiaron la novela: Vía Crucis del sueño americano

7 comentarios:

Anónimo dijo...

EL AUTOR DE ESTE ANALISIS DE LA GRAN NOVELA DE RESTREPO DEBE LEER EL DEL DIARIO EL PAIS DE ESPAÑA PARA APRENDER COMO SE HACE UNA VERDADERA CRITICA DE UNA NOVELA.

Claudio dijo...

Estimado anónimo,
El hecho de que a usted le haya gustado la novela de Restrepo y el señor Belcore la haya considerado regular, ¿lo autoriza a usted a señalarle que no sabe hacer una crítica y que debe "aprender"? ¿Tan difícil le resulta aceptar que pueden tener gustos distintos?
Ya que hablamos de aprender, le sugiero a usted un aprendizaje: el de la tolerancia. Se lo recomiendo, le hará la vida más grata y podrá aprender cosas nuevas.
Saludos,
Claudio

Guiasterion dijo...

Gracias Claudio.
G.B.

Javier Gimeno dijo...

Estimado Guillermo Belcore y demás comentaristas: Tengo que confesar que Hot sur me ha gustado más que Delirio, la otra novela de Restrepo que he leído. No coincido, pues, con las críticas negativas de la obra, incluida la propia del autor de este excelente blog literario. Ello a pesar de que coincido con las críticas de algunas deficiencias de la novela, que no de la trama en sí (la huida de la protagonista en el juicio ante la señal de su abogado, entre otras varias). Pero, en general, me ha parecido una obra bien concebida y estructurada, bien ambientada, bien escrita, con sus personajes bastante bien caracterizados y una buena disposición de los diferentes planos narrativos, entre otros aspectos. No comparto las críticas a la visión de la autora respecto de la inmigración latinoamericana a EEUU o su denuncia del sistema carcelario en ese país o al llamado "sueño americano", denuncias que, cuestiones literarias al margen, comparto en líneas generales. Un cordial saludo. Javier Gimeno. Madrid.

Guiasterion dijo...

Querido Javier:

Muchas gracias por su comentario, señor. Bien argumentado y amable. ¡Ojalá inspire a los guarangos anónimos que les encanta insultar!

No encuentro nada que objetar en sus palabras. Tan sólo puedo añadir que, en ultima instancia, hay un punto donde el gusto separa a los lectores. No todo es para todos, afortunadamente coexisten en el universo del lector diferentes sensibilidades (hace unos días, verá, escribí al respecto). En el debate nos enriquecemos.

Diré entonces que 'Hot Sur' no es para mí, pero admito que algo tiene.

Un abrazo y espero seguir contando con sus aportes.

G.B.

Celeste dijo...

Hola a todos los amantes de la literatura...
Coincido en que nunca nos pondremos de acuerdo sobre gustos y opiniones. La obra literaria es arte: produce adhesiones y rechazos, gustos y disgustos... Pero por sobre todo: inquieta, al punto tal que desencadena comentarios diversos y variados como los que leemos. Si el arte no produce eso en la sensibilidad popular, entonces ¿para qué existe? Por eso apruebo la multiplicidad de miradas para analizar una obra tan diversa como es "Hot Sur" de Restrepo. Coincido en que es una novela atrapante, pero al mismo tiempo considero que ha pecado en tópicos remanidos en partes, como en el final. Pareciera que la escritura del desenlace se la hubieran encargado a un escritor inexperto. No parece de puño y letra de la propia Laura Restrepo. A decir verdad, ese final me decepcionó: deja el suspenso de lado para cerrar la historia rápidamente y lo que se había dilatado ampliamente a lo largo de la novela (el encuentro con el asesino)de repente se reduce a unas cuantas líneas irrisorias; con una simplicidad absoluta y casi inverosímil, se cuenta cómo los perros lo atacan y luego aparece la policía y, ridículamente, sale airoso de toda esa confusa situación en donde se combinan el ritual, la sangre, la venganza y el dolor.
En resumidas cuentas, la novela me atrapó y al mismo tiempo me decepcionó. Esperaba más al final...
Saludos a todos, amantes de la literatura.
Celeste

Guiasterion dijo...

Gracias, Celeste. Comentarios tan bien argumentados como el tuyo enriquecen este blog que, repito a los detractadores, sólo pretende compartir experiencias de lectura: agradables o frustrantes, cuestión de gustos en última instancia.

G.B.